En las instalaciones del Liceo Salvadoreño se vivió un encuentro lleno de fraternidad y espiritualidad, congregando a las comunidades Maristas de Guatemala, El Salvador y Honduras. Hermanos Maristas y laicos comprometidos se reunieron para convivir como una sola familia, compartiendo experiencias, fortaleciendo lazos y renovando su compromiso con la misión educativa y evangelizadora de San Marcelino Champagnat.
Como parte de la recepción, se llevó a cabo una tarde cultural llena de alegría y creatividad, donde todos los asistentes disfrutaron de presentaciones artísticas preparadas por los estudiantes del Liceo Salvadoreño. Este espacio permitió a los participantes apreciar y celebrar las diversas manifestaciones culturales, creando un ambiente de unidad y celebración. Después de la tarde cultural, a los presentes se les invitó a una exposición fotográfica que reflejaba la historia de los 100 años de presencia marista en el Liceo Salvadoreño, permitiendo a todos los asistentes conocer y valorar aún más el legado marista en la región.
Para culminar la jornada, todos se reunieron en la capilla del colegio para tener un momento de oración ofrecido a la Virgen María, pidiendo su intercesión y bendición para todos los presentes. Este momento de recogimiento espiritual reforzó el sentido de comunidad y el compromiso compartido con los valores maristas.
El segundo día de la Reunión Intercomunitaria Marista continuó desarrollándose en la Casa de Retiros El Hermitage, donde hermanos maristas y laicos participaron en jornadas de reflexión y socialización de temas cruciales para la Provincia Marista de América Central. Este encuentro fue una oportunidad invaluable para profundizar en la misión, compartir experiencias y fortalecer la comunidad Marista, trabajando juntos para enfrentar los desafíos y construir un futuro lleno de esperanza y solidaridad.
Fue un día lleno de trabajo en equipo y reflexión sobre temas esenciales para la comunidad Marista. La jornada cerró con una solemne eucaristía en la que se pidió especialmente por los hermanos Jorge Muñoz y Nice Garrán, quienes estaban celebrando sus cumpleaños, y por Arturo Espinoza, un laico vinculado que emprenderá un viaje a Cuba para brindar apoyo a la comunidad Cienfuegos.
Este encuentro ha sido una oportunidad única para reflexionar, aprender y crecer juntos, reafirmando los valores y el compromiso con la educación integral de niños y jóvenes.