En el marco de la celebración de los 25 años de canonización de San Marcelino Champagnat, el Movimiento Champagnat de la Familia Marista (MCFM) de la Provincia de América Central, El Salvador formado por 12 fraternidades, celebraron el día 21 de abril del presente año, en el colegio marista San Alfonso, en mejicanos, iniciando con misa en el cuarto domingo de Pascua, en la que se invitó a imitar las actitudes y gratitudes del Padre Champagnat como buen pastor para la iglesia y para los hermanos y laicos maristas.
Así también, con la participación de las fraternidades se destacaron cualidades y valores que hicieron posible que este hombre de Dios sencillo, fuerte, sin dobleces, cercano, con fe firme, mucha ternura, que se dejó moldear por el Espíritu, ya que todo lo hacía desde el corazón de Dios, fuera elevado a los altares.
A su vez, el hermano marista Adolfo Cermeño, actual rector del Colegio Marista de Alajuela en Costa Rica, la hermana marista Daisy Contreras, actualmente encargada del proyecto Tejiendo Sueños en El Salvador y el laico Mario Iraheta, ex alumno de la Escuela Marista San Alfonso y Liceo Salvadoreño, compartieron su vivencia de ese día 18 de abril de 1999, en Roma, la cual describieron como un regalo de Dios y comentaron sus experiencias, haciendo eco que viven el ADN marista.
Posteriormente, se reflexionó con el hermano marista Rodrigo Cuesta, sobre dicho acontecimiento, haciendo énfasis que el mejor milagro de su santidad era la presencia de los asistentes como partes del Movimiento Champagnat, por lo que la santidad de San Marcelino sigue adelante, y se nos invita a caminar sus huellas en el seguimiento de Jesús.
Finalmente, se entregó como recuerdo una estola conmemorativa y se cerró la celebración con un compartir y degustación de pastel.